El maligno tiene diversas maneras de mostrar lo malo como algo bueno, por ello cuando se cae en la seducción del demonio presentado el pecado como un placer y a partir de allí, caes en consciencia de que haz echo algo malo, que te quita la paz haciéndote sentir culpable...

Por ello, en octubre el Papa Francisco pidió a todos los que nos sentimos seguidores de Jesucristo a unirnos en una “campaña de oración”, dedicada a la protección de la iglesia como un arma para combatir al demonio que divide la familia.

En el comunicado publicado por la Santa Sede el pasado 29 de septiembre, el Santo Padre invitó “a todos los fieles, de todo el mundo, a rezar cada día el Santo Rosario, durante todo el mes mariano de octubre y a unirse así en comunión y penitencia, como pueblo de Dios, para pedir a santa Madre de Dios y a San Miguel Arcángel que protejan a la Iglesia del diablo, que siempre pretende separarnos de Dios y entre nosotros”.

En su homilía del pasado 11 de septiembre, citando el primer capítulo del Libro de Job, el Pontífice afirmó que la oración es el arma contra el gran acusador que "vaga por el mundo en busca de acusaciones" y solo la oración puede derrotarlo. Por ello, recalcó que cada rosario diario deberá culminar con la invocación de la santa Madre de Dios y San Miguel Arcángel con las siguientes oraciones:  

Bajo tu amparo nos acogemos, santa Madre de Dios;

no deseches las súplicas que te dirigimos en nuestras necesidades,

antes bien, líbranos de todo peligro, ìoh, siempre virgen, gloriosa y bendita!

San Miguel Arcángel, defiéndenos en la lucha. Sé nuestro amparo contra la perversidad y asechanzas del demonio. Que Dios manifieste sobre él su poder, es nuestra humilde súplica. Y tú, oh Príncipe de la milicia celestial, con el poder que Dios te ha conferido, arroja al infierno a Satanás y a los demás espíritus malignos que vagan por el mundo para la perdición de las almas. Amen.

En este mes de mariano y de la familia, nos unimos en oración por las intenciones de la iglesia que ayudarán en el combate diario de las tentaciones del mundo, donde cada vez se promulga una cultura del descarte y división.

Redacción: María  Virginia Matheus Gotera  / Fotografía: Vatican news